No se sabe con seguridad la antigüedad del arte de las miniaturas embotelladas. El barco embotellado más antiguo data de 1784 y se encuentra en Alemania. Además de barcos, se han embotellado miniaturas de casi cualquier cosa, como puede apreciarse en la colección “A Tiny World in a Bottle”, del artista japonés Izumi Akinobu.
En el mundo de las historietas, se ha embotellado también una ciudad. Se trata de Kandor, la capital de Kriptón, planeta natal de Superman. El artífice de este fenómeno es el supervillano Brainiac, que no realizó una reproducción sino que ha reducido realmente a la ciudad, con habitantes y todo. No obstante y sin saberlo, Brainiac salvó a Kandor de la posterior destrucción del planeta Kriptón, y junto con ella a miles de kriptonianos que han sobrevivido, aún midiendo pocos milímetros de estatura.
Cuando Brainiac llegó a la Tierra con la intención de reducir y embotellar otras ciudades terrestres para ampliar su colección, Superman logró derrotarlo y recuperar la ciudad embotellada de Kandor. La llevó a su Fortaleza de la Soledad en el Polo Norte para protegerla con la esperanza de, algún día, devolverle su tamaño normal.
Superman aún no ha tenido éxito en esta empresa. Sin embargo, sí ha logrado reducir su propio tamaño a fin de visitar la ciudad dentro de la botella. Allí pudo comprobar que en la Kandor miniaturizada la vida continúa tal como era antes de la destrucción de Krypton.
En la botella, donde "se mantienen las condiciones de gravedad de Krypton", Superman se convierte en un ser humano común, sin superpoderes, aunque recupera el uso de sus poderes en el momento en que sale de la botella y vuelve a entrar en el medio ambiente terrestre. La Kryptonita no tiene ningún efecto sobre Superman mientras permanece en Kandor, porque allí él es sólo un simple mortal. Del mismo modo, cualquier kandoriano que salga de la botella adquiere instantáneamente superpoderes idénticos a los de Superman, junto con la vulnerabilidad a las diversas formas de kryptonita. Es por ello que en Kandor se ha formado un cuerpo de élite llamado Superman Emergency Squad, que consta de pequeños hombres vestidos con trajes rojos y azules, idénticos al de Superman. Este equipo posee sofisticados “monitores terrestres” que vigilan las actividades de Superman en la Tierra, y acuden en su ayuda en momentos de emergencias especiales.
Así Superman no está solo en su lucha contra el mal: cuenta con un mini ejército de mini superhombres que, al igual que él, sobre la Tierra son más rápidos que una bala, y poseen aproximadamente el mismo tamaño.
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